El lenguaje silencioso de los colores
Para la pintura a la acuarela se enseña la preparación del papel, que se humedece y luego se pinta. Los preparativos ya son una práctica para el orden, ya que los niños necesitan organizarse para recibir su tabla de acuarelas, pinturas, pinceles, agua y estirar el papel en la tabla. Primero experimentan los tres colores básicos por separado, azul, rojo y amarillo, y luego comienzan a mezclar los colores sobre papel y experimentan los matices de las más variadas mezclas.
Los niños aprenden a dar forma a los cuadros y a realizar bellas obras. Carlgren y Klingborg sostienen que “es difícil expresar con palabras lo que la experiencia intensa de los colores puede representar más adelante en la vida de las personas. Porque es una riqueza interior que no es palpable, de cualidades y matices demasiado sutiles para describir. Pero una cosa es cierta: el mundo entero es diferente para aquellos que han comenzado a experimentar y comprender el lenguaje silencioso, no intelectual y profundamente penetrante de los colores”.
CARLGREN, Frans y KLINGBORG, Arne. Educación para la libertad: la pedagogía de Rudolf Steiner. 2006, pág. 55.
Imagen destacada: dibujos de alumnos de la Escuela Municipal de Araucária.