Cuentos de hadas – Consejos para el maestro

Cómo contar historias y cuentos de hadas.

Clase con la profesora Marisa Cristina dos Santos

Los cuentos de hadas son, según Rudolf Steiner, un tesoro espiritual de la humanidad. Fruto de experiencias primordiales de la existencia humana, su realización tiene un efecto inconsciente en el alma al rescatar, a través de imágenes significativas, el largo camino de la maduración humana en la tierra.
Por eso, las personas de todos los tiempos, especialmente los niños, siempre han reconocido en ellos, aunque sea inconscientemente, algo relacionado con su propia alma. Reyes, princesas, enanos, gigantes, todas estas imágenes corresponden a las profundas realidades internas del hombre.

Se narran repetidamente, siempre en la misma secuencia, si es posible con las mismas palabras, ya que representan un verdadero “alimento” para el alma de los niños, además de estimular la memoria. Nunca debemos intentar interpretar, o encontrar alguna "moraleja de la historia", para los niños. Las imágenes experimentadas por ellos madurarán poco a poco, en el inconsciente de cada uno. En el jardín de infancia, cada historia se narra en su totalidad, para que el niño reciba la imagen completa, y no por capítulos, porque en esta etapa, según Passerini, no puede volver a contar una historia con un principio, un medio y un final. Su memoria se limita a aspectos que sufren interferencia de sentimientos, es decir, el niño recuerda las escenas que le produjeron placer o miedo.

En el jardín de infancia, el tono de voz que utiliza el docente es monocorde, para favorecer un ambiente onírico, y no inducir al niño a una imagen que no es la creada por él mismo, a partir del cuento narrado. Un ambiente de penumbra, con una vela encendida, también estimula la experiencia de imaginación del niño. Para niños muy inquietos, las historias también se pueden contar con el apoyo de muñecos de trapo, muy sencillos, en forma de pequeño teatro.

Para niños de 6 a 7 años, en primaria, ya se pueden narrar por partes, y no se suelen repetir. Cada día, antes de continuar con la historia, el profesor anima a los alumnos a que cuenten libremente lo que recuerdan de lo contado el día anterior.

Para saber más, lea “Los cuentos de hadas: su poesía e interpretación”, de Rudolf Steiner, y “El hilo de Ariadna, de Sueli Passerini.

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