Belén del hombre

Tema: Navidad

poema de ruth salles

Cada movimiento del ser
se expande en ondas, como el agua
un guijarro tirado allí
que desaparece en él y ni siquiera se ve.
Estas ondas vienen del poder
de conciencia casi divina
que nace en el alma pequeña
querer ser realmente el Sí mismo.

Tal conciencia casi divina,
que chico tan humilde y regio,
nacido en la cueva fría y dura
– nuestra estructura mineral –
sobre una paja áspera e imprecisa
– nuestro organismo vegetal –
bajo el aliento de burro y buey
- Impulso de alma doble
aspectos del Hombre a emerger:
Un terco, para resistir
e insistir y decidir;
y uno que se deja llevar
y que, pasiva, cede y se va.
A su lado están la madre y el padre:

la madre ya tiene dentro
savia ligera que os nutrirá;
el padre lucha por conseguir
fuera el pan de su futuro;
mentira en madre silencio y calma
de milenios que forman el alma;
apartarse del padre rumor y acción
en el descubrimiento de la razón.

Ese chico al que visitaron

jóvenes pastores sonrientes:
es el Amor, que escucha la llamada,
No pregunta nada y luego responde.

Ese chico al que visitaron

también los magos viejos y serios
que, desde la sabiduría misma,
extrajo la hora y el día.

De los pastores recibiréis

la simple piel de una oveja,
para que aprendas a obedecer
en el resplandor de esa chispa
que conduce a la búsqueda directa,
en el que la pálida criatura
se eleva en luz y esplendor.
Para quien aprende a ser oveja
de sí mismo será un pastor.

De los tres magos finalmente vienen a él

las tres semillas de la Trinidad:
oro, incienso y mirra contienen
Sabiduría, Amor, Voluntad.

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